LOS EVANGELIOS RETOCADOS Y REESCRITOS
Jesús no escribió nada. Sus palabras, esparcidas por los
caminos, han sido transmitidas de boca en boca y luego transcriptas
en diversas épocas, mucho tiempo después de su
muerte. Poco a poco se fue formando una tradición religiosa
popular que ha sufrido una evolución constante hasta el
siglo IV.
Desde el año 70 en adelante es cuando aparecen las primeras
relaciones escritas. Primero la de Marcos, que es la más antigua,
y luego los primeros relatos atribuidos a Mateo y a Lucas, todos
escritos fragmentarios que van aumentando en ediciones sucesivas,
como todas las obras populares.
Posteriormente, apareció el Evangelio primitivo de Mateo, perdido
actualmente y el Evangelio de Lucas; y por último, del 95 al
110, apareció en Éfeso el Evangelio de Juan.
Al mismo tiempo de estos Evangelios, únicos aceptados después
por la Iglesia, otros muchos salían a la luz. Actualmente se
conocen más de cuarenta. En el siglo III, Orígenes cita un gran
número. Lucas hace alusión a ellos en el primer versículo de la
obra que lleva su nombre.
¿Qué autoridad pueden tener o atribuírsele a los cuatro relatos,
si cuando se ha procurado coordinarlos, ha resultado imposible, ya
que los mismos se contradicen?.